Descripción
El pensamiento profundo y la comprensión de la realidad cobra sentido cuando se acompaña
de la capacidad de comprender(se) y comprender al otro; qué necesidad tiene desde su contexto: qué piensa, cómo y para qué; de qué forma lo que se aprende deviene no sólo en la oportunidad de formarse intelectualmente, sino de abrirse a otras formas de ser, sentir y
relacionarse; entender la realidad para transformar(se) y ser transformado a través del otro.