Define, desde el punto de vista jurídico, la exigibilidad de la educación como derecho fundamental y derecho humano, así como su diferenciación. Considera, tomando de la Sagradas Escrituras, el papel educativo de las familias y la pedagogía de Jesús. Enlaza luego con hechos históricos y características de la educación en la Compañía de Jesús, para resaltar la dimensión religiosa de la educación, señalando como área de mejora la profundización de la Educación Personalizada.