La entrevista con Manu Andueza resalta la importancia de una educación que no solo instruya, sino que también inspire y transforme. La paz, la esperanza y el diálogo son elementos fundamentales para construir una escuela que prepare a los estudiantes para enfrentar los desafíos del mundo actual, promoviendo una cultura de fraternidad y entendimiento mutuo. La educación debe ir más allá de la mera transmisión de conocimientos; debe fomentar un ambiente de paz y diálogo, rompiendo con la cultura del enemigo que prevalece en la sociedad actual. La paz no es solo la ausencia de violencia, sino una forma de relacionarnos y construir una cultura de fraternidad. La esperanza es fundamental en el proceso educativo. Andueza cita a Paulo Freire, quien define la esperanza como una fuerza activa que impulsa la transformación social. La educación debe inspirar a los estudiantes a encontrar sentido en su vida y en sus luchas. Se mencionan iniciativas que integran la realidad en el aula, promoviendo la reflexión sobre temas sociales actuales, y la participación de profesionales de diversas áreas para enriquecer el aprendizaje.