Somos una comunidad diversa en cuanto a tamaño de las iniciativas que acompañamos, los contextos en los que trabajamos, las cadenas de valor en las que nos focalizamos y, por supuesto, las culturas en las que estamos enraizadas. Sin embargo, nos une el deseo y el compromiso por contribuir a lograr condiciones de buen vivir para las personas y sus comunidades. Entendemos por buen vivir la posibilidad de desplegar prácticas de vida basadas en el respeto, la armonía, el equilibrio, la espiritualidad y la reciprocidad entrelos seres humanos y la casa común. Este buen vivir no es una utopía sino una realidad que toma forma de maneras muy diversas en los contextos y las tradiciones culturales en las que se despliegan las alternativas. No se trata de vivir mejor sino de vivir bien. Los rasgos que presentamos son el horizonte futuro que anima la marcha de nuestra caravana Comparte, pero, también, el presente que se materializa en las iniciativas económico-productivas que acompañamos.