Entre estos mensajes del P. Pedro Arrupe, en el X Congreso Europeo de Asociaciones de Antiguos Alumnos de Jesuitas -especialmente de colegios-, en la tarde del 1 de agosto de 1973, indudablemente uno de los esenciales y que todavía hoy día sigue marcando a los miembros de la Compañía y a los que trabajamos con ellos es el del “Ser hombres y mujeres para los demás”. Justamente se cumplen el aniversario de “bodas de oro” de su profética conferencia. En esta ocasión, quiero hacer memoria de aquellos signos con que nos educaron los jesuitas a quienes fuimos estudiantes de instituciones en la década de los setenta y que, en adelante, se seguirían proyectando hasta llegar a nuestra época, en la cual, en medio de tanta tecnología y con un neoliberalismo desembocado, los que hemos seguido ese camino pretendemos todavía educar tratando de convertir el egoísmo floreciente y rampante en un “formar hombres y mujeres para los demás”.