La interculturalidad de los primeros jesuitas se expresa en el deseo de reconocer a Dios en el otro, en el diferente y compartir la cultura con actitud positiva, como se dio en las misiones guaraníes; ofrece una mirada al concepto y enfoques de la interculturalidad hoy, recordando que para la educación jesuita su fundamento está en la cosmovisión ignaciana del mundo y con ello en el entendimiento, respeto, aprecio y promoción de las culturas.