Descripción
Los efectos del cambio climático se han sentido en América Latina y el Caribe a un ritmo creciente constantemente en los últimos años. Las consecuencias del cambio climático van más allá de la degradación ambiental e incluyen implicaciones físicas y socioeconómicas. El éxito y el bienestar de las
generaciones futuras depende de nuestro compromiso renovado de cuidar nuestra casa común y comprender nuestra interconexión e interdependencia con la naturaleza.
El Papa Francisco nos llama a “reemplazar el consumo por el sacrificio, la codicia por la generosidad y el despilfarro por el espíritu de compartir” en su segunda encíclica, “Laudato Si”. La justicia climática no es simplemente un objetivo a alcanzar, sino un proceso y compromiso de por vida que requiere una reflexión y una promoción constante. Podemos abordar el cambio climático cambiando nuestra propia relación con el medio ambiente, apoyando el trabajo de las organizaciones que están al frente de este problema y presionando por un cambio en las políticas que defienden el carácter sagrado de nuestra casa común.