Descripción
Adoptar el modo de proceder ignaciano en los distintos procesos de institucionalización
de la universidad ha sido una intención presente a lo largo de la historia del
ITESO. Esta intención ha transitado por caminos pensados para propósitos y destinatarios diferentes. Se ha buscado, por ejemplo, crear espacios y ambientes para
que las personas puedan, en libertad, tener la experiencia de la espiritualidad ignaciana
y la apliquen en su vida universitaria. Se ha querido concretar la inspiración de San Ignacio al tener presente la responsabilidad de transformar la realidad social en proyectos de docencia, investigación y vinculación. También, se ha pretendido que el estilo ignaciano se traduzca en los criterios para establecer las normas y los acuerdos que regulan los ámbitos de la convivencia universitaria