Descripción
La espiritualidad ignaciana es una opción de vida, un modo de situarnos como personas en nosotras mismas, de comprendernos, de ejercernos y de vincularnos con las demás personas y el mundo. Es una forma de comprender nuestro proceso de humanización situadas en nuestra dignidad y en nuestras más plenas posibilidades de vida. Ya sea en una parroquia, un centro de espiritualidad ignaciana, una obra social, misión o institución educativa, como la Universidad Iberoamericana Ciudad de México-TIjuana, la Compañía de Jesús tiene un modo de proceder, que se
desprende de la espiritualidad ignaciana, centrado en la confianza fundamental
de San Ignacio de Loyola en el discernimiento personal y comunitario, como un
ejercicio de la libertad. Apropiándose del paradigma pedagógico ignaciano como su modo de proceder, el Centro Ignaciano de la Universidad facilita procesos de formación en la espiritualidad ignaciana siguiendo la metodología del discernimiento ignaciano. De modo que cada persona, desde su contexto e
historia, se inserta en un proceso de renovación y conversión para que, en la
medida de sus necesidades, posibilidades y deseos, se reconcilie consigo misma,
con las demás personas, con Dios y la naturaleza.